viernes, 4 de abril de 2008

VENGANZA



La organización estaba constituida por profesionales de diferentes disciplinas; investigadores privados, abogados, médicos, psicólogos, ex mercenarios, expertos en seguridad privada, actores y sicarios.

Llegar a ellos no fue nada fácil, para conseguir la primera información sobre sus servicios había que desembolsar una importante suma. El siguiente paso fué a través de internet, donde fui atendido por un busto parlante infográfico. Él sería mi interlocutor a partir de aquel momento. Me informó cuidadosamente de todos los servicios que su empresa podía ofrecerme a través de una especie de messenger privado. El pago debía hacerse mediante apartado de correos y siempre en metálico.

Existían distintos niveles de servicio, agrupados en packs:
Pack A: Ruina económica de la víctima.
Pack B: Ruina económica y psicológica.
Pack C: Contenía los packs A y B e incluía daños a terceros, normalmente familiares y seres queridos.
Pack D: Incluía todos los anteriores, más daños físicos a la víctima.
Pack E: Muerte accidental de la víctima.

REVENGE INC. Especialista en venganzas por encargo, aseguraba el éxito de sus acciones en un plazo inferior a un año, dependiendo del Pack elegido.

Sus depurados métodos y su técnica refinada, conseguían que el objetivo se cumpliera siempre. El ataque sobre la víctima, tenía apariencia de casualidad, mala fortuna del sujeto en los negocios, en su vida privada y en todas sus relaciones. Algunos casos conducían al suicidio de la víctima, haciendo inútil la contratación del Pack E, con el consiguiente ahorro que eso supone.

No era posible vincular a la organización y mucho menos al cliente en sus actividades. El resultado era seguro, fiable y definitivo.

Ni que decir tiene que las tarifas eran astronómicas. Vendí casi todas mis propiedades para hacer frente a sus honorarios, con la satisfacción previa de ver pronto realizada mi venganza.

Dicen que la venganza es un plato que se sirve frío. Frío sí, pero el más delicioso. No existe placer que se le parezca, es inconmensurable, grandioso.
Ya habían transcurrido más de siete años, desde que pude desembarazarme de K. Aquel vampiro emocional que destruyó quince años de mi vida, que deberían haber sido los mejores. El daño fue irreversible, para siempre. Aún hoy, a pesar del tiempo transcurrido, sufro pesadillas de vez en cuando y sé que no cesarán hasta que se cumpla mi venganza.

A los seis meses, finalizó el proceso. Desde el inicio de la acción, REVENGE, INC. Me pasaba un dossier quincenal con los progresos obtenidos; un informe por escrito actualizado de los daños, fotografías y videos que demostraban los avances de mis verdugos por encargo.

El fin de semana, arrellanado en mi sillón, me entregaba a estudiarlos lentamente, paladeándolos, deteniéndome en los detalles, en un goce sordo, maravilloso.
La última entrega, como es lógico fue la mas sabrosa. En el video, K era conducido por un enfermero en su silla de ruedas. Había envejecido de tal modo que era casi irreconocible. Su mirada ausente expresaba su total ruina psicológica.

Después de unas semanas fui a verle. Necesitaba ver en directo el resultado. Me senté frente a él, permanecía inmóvil mientras me miraba, pero sus ojos pestañearon al reconocerme y en algún rincón de su mente destruida sintió una punzada de dolor al verme sonreír.

Al día siguiente llamé a REVENGE, INC. para encargar una nueva venganza, esta vez contrataría el Pack E: Muerte accidental de la víctima. Dejé la forma de pago y todo lo demás dispuesto en manos de un Notario. La víctima en este caso merecía el Pack E, por no haber sabido defender lo más sagrado, quince años de su propia vida.

Continué con mi vida normal, a la espera del accidente mortal.

6 comentarios:

LA CASA ENCENDIDA dijo...

Puñeta!!!!! Que malo es el odio y hasta donde somos capaces de llegar, ¿verdad?
Besos

Inés Perada dijo...

Ya sabe, no hay peor enemigo que uno mismo: el enemigo en casa que lo llamo yo.

Salud.

Anónimo dijo...

Uysss me he puesto al día que andaba retrasada... y me encuentro toda esta perversidad con premeditación y alevosía. Dios nos libre de esas compañia que usted frecuenta.
Me uno a los rezos de Akroon... a ver si conseguimos salvar su alma... jajaja
Un beso

Anónimo dijo...

Qué sofisticado y lúdico es este vengador. Ya puestos (y con mucho menos glamour, dónde va a parar) le podía haber arreado un garrotazo a su víctima y luego un par a sí mismo. Al menos se quitaría el estrés de estar esperando todos los días por si es el último.

Y ahora una pregunta cotilla..... ¿qué le habrá hecho la víctima para ponerlo tan arisco?

Besazos.

Anónimo dijo...

No sé, no sé, me parece esta chica muy cobarde. No por vengarse, sino porque la venganza carece de salsa si no se cocina en tu propio horno y porque lo que a esta chica le pesa no son sus quince años perdidos sino la pérdida de ese amor que se ve que le atravesó el corazón. Cachis.

Nanny Ogg (Dolo Espinosa) dijo...

Yo me conformo con la venganza imaginaria, luego prefiero seguir con otra cosa. Perder años meditando y esperando la venganza me parece un desperdicio.

Besos